La lubina es un pescado blanco o semigraso muy valorado en la gastronomía. Suele alimentarse de pequeños crustáceos como quisquillas o erizos de mar, de ahí su sabor sutil y refinado.
Seleccionamos los mejores ejemplares procedentes de piscifactorias nacionales. Su carne, apenas sin espinas, tiene un sabor suave y su olor es poco pronunciado.
Con cuerpo alargado, robusto y cabeza puntiaguda de un color gris plateado. Es uno de los pescados de carne blanca con menor porcentaje de aporte de grasas, contiene un gran aporte de vitaminas del grupo B y alto contenido en minerales.
Algunas de las formas de consumo más deliciosas son, al horno con base de verduras y patata, a la espalda y a la sal.